El estandarte, símbolo tradicional de la cultura zapoteca
#Juchitán 30 mayo (#istmopress).- Su solitario espacio envuelve lo místico de su arte, en cada trazo que elabora primero a lápiz y después con pinceles de diversos tamaños va implícito rasgos de la cultura zapoteca del Istmo de Tehuantepec, Cándido Carrasco López crea “Estandartes” en donde ha conservado e impulsado por más de medio siglo la tradición zapoteca de las velas (festividades sociales y religiosas nocturnas).
Cándido Carrasco de 83 años de edad y originario de Juchitán, desde hace más de 50 años realiza estandartes y banderas en donde a través de su imaginación y experiencia plasma elementos y símbolos de la vida cotidiana, religiosa y cultural del Istmo de Tehuantepec.
El estandarte se utiliza en una festividad en honor a un santo o una virgen de la religión católica o un centro ceremonial sagrado del pueblo indígena zapoteca , es portado por menores de edad o adultos quienes pagan una manda por salud y bienestar solicitada por familiares cercanos a lo cual se les llama “capitana o capitán”.
Los capitanes o capitanas cargan los estandartes en un paseo y regada de flores y frutas por las principales calles y avenidas, principalmente de Juchitán en donde durante un mes se realizan las tradicionales velas del mes de Mayo.
El artista popular, Cándido Santiago recordó que a muy corta edad mostró sus dotes de artista, realizaba murales en las paredes de su casa como si fueran pinturas rupestres, con el paso del tiempo a los 20 años se casó lo cual lo obligó por necesidad económica a aprender el oficio de la carpintería.
Durante más de 10 años practicó la carpintería en donde realizaba algunos dibujos sobre los muebles de madera, sin embargo fue en el año de 1972 cuando realizó el primer estandarte en honor a San Pedro Mártir.
De forma autodidacta, comenzó a plasmar las imágenes algunas veces flores multicolores imaginando el traje regional típico de la mujer istmeña combinado con una cinta multicolor que simula a la cadenilla (cadenas de hilo de distintos colores y formas).
La tranquilidad con que coge el pincel para sumergirlo en las pinturas hacen del arte de Cándido la precisión y una textura fina que gusta a muchos, razón por la cual en época de las Velas de Mayo, pinta más de cincuenta.
Para elaborarlas, el artista dedica más de 30 horas de su día, plasma un color y lo remata con otro a fin de que cada textura sea un arte y no una simple pintura.
“El estandarte tiene su chiste, no se hace al tanteo, el arte de la pintura lo heredé de chamaco porque siempre me ha gustado dibujar, mis cuatro hijos me dicen que deje de hacerlo, pero les digo que el día que lo haga moriré por eso seguiré…»
Hola tendrán el contacto de este señor ?