Ante falta de recursos, piden ayuda para que único refugio de mujeres indígenas en Oaxaca siga funcionando
Diana Manzo
Oaxaca, Oax.- “Hoy, el Refugio
«China Yodo» requiere de tu ayuda solidaria para seguir brindando la atención gratuita”, así se lee en el cartel que difunden en redes sociales las integrantes del Grupo de Mujeres 8 de Marzo, una agrupación social que brinda desde hace más de tres décadas atención a mujeres víctimas de violencia en el Istmo de Tehuantepec.
El refugio China Yodo ha protegido la vida de más de 900 mujeres indígenas desde hace 20 años, no solo a mujeres del Istmo de Tehuantepec, si no de todo el país.
Un refugio explican las activistas es un espacio temporal que ofrece servicios de protección, alojamiento y atención con perspectiva de género a mujeres, sus hijas y sus hijos que viven en situación de violencia familiar o de género extrema.
En entrevista con Natalia Sicarú Torres Hernández, integrante del Grupo de Mujeres 8 de marzo explica que esta colecta solidaria se hace ante la falta de recursos oficiales, pues la violencia contra las mujeres no se detiene.
“En este espacio son resguardadas mujeres que enfrentan la violencia feminicida. Se les brida atención integral. Y aunque su capacidad es de 11 núcleos familiares, actualmente hay 7 familias”, informó.
La activista señala que toda ayuda es necesaria, y para ello solicitan alimentos no perecederos, artículos de limpieza y de aseo personal.
“Cada ayuda es buena y se acepta” puntualizó la activista zapoteca, quién dijo deber ser
entregados directamente a las oficinas del Centro de Apoyo y
Atención a la Mujer Istmeña (CAAMI), dirección calle Biguia Núm. 11, colonia Rodrigo Carrasco López.
*Un refugio salva*
Sobrevivir para Ana y Rosy, dos mujeres istmeñas es un acto de resistencia. De 35 y 26 años respectivamente, ambas son madres de familia y narran que estar en un refugio para mujeres les ha permitido salvaguardar su integridad de la violencia feminicida y vicaria que aún enfrentan.
Sanar las huellas de la violencia es lo más les ha costado. El trabajo integral es respaldado pro profesionales del área de trabajo social, psicología y derecho del refugio para mujeres “China Yodo” y también por el Centro de Atención a la Mujer Istmeña (CAMI).
“Tengo casi 3 años que el papá de mi hijo me lo quitó con violencia. Primero me corrió de la casa y después me hizo firmar la guardia y custodia en medio de una crisis emociona que yo enfrentaba. Es inexplicable el dolor que siento, pero gracias al refugio estoy viva, el trabajo que hacen para salvaguardarnos, no tengo ni como pagarlo”, explica Ana.
Mientras cuenta como ha sido su sobrevivencia, Ana toma un respiro, las lagrimas caen, está triste, sin embargo, reafirma que ninguna mujer debe vivir violencia, y aunque la violencia vicaria de la cual es victima parece silenciosa, el daño emocional es muy fuerte.
La violencia feminicida en aumento en Oaxaca***
De acuerdo con datos del refugio China Yodo desde la pandemia, la
Violencia feminicida está en aumento.
Mientras que en la Casa de Atención a la Mujer Istmeña (CAMI), señalan que un promedio de 20 mujeres denuncian violencia por primera vez.
Claudia Valeria Hernández, directora del CAMI confirmó que la Violencia familiar y feminicida es una constante y está en aumento.
Dijo que su responsabilidad siempre ha sido brindar acompañamiento profesional a las mujeres que enfrentan violencia y sobre todo no dejarlas solas.
Agregó que mucha gente critica su labor , sin embargo trabajar muchas veces sin presupuesto significa un compromiso con las mujeres para salvaguardar sus vidas.
“Hemos atendido inclusive hasta 45 mujeres por primera vez al mes, más las mujeres que ya están agendadas, esta labor que hacemos es gratuita y lo hacemos con mucho gusto”, dijo.
La edad promedio de las mujeres violentadas es de 25 a 35 años, sin embargo para el 2024, las mujeres adultas de 50 a 64 años reportaron un aumento de violencia familiar.
Por su parte, el Grupo de Estudios para la Mujer “Rosario Castellanos” son ya 35 muertes violentas de mujeres en lo que va de enero a este 11 de junio del 2025, en este estado sureño de Oaxaca.