Marcela “Jaxëëw” lleva 18 años sin curp por tener un nombre mixe
*Frustración y desgaste económico ha padecido por trámites burocráticos
#Juchitán 16 Nov (#Istmopress) – Cuando sus padres la nombraron “Marcela Jaxëëw ” fue por orgullo para conservar la lengua y la gramática de su cultura ayuujk (mixe) y no de frustración como el que ahora vive, a sus 18 años de edad su nombre no está escrito de forma correcta en su Clave Única de Registro de Población (Curp) que expide el Registro Nacional de Población (Renapo) por que el sistema digital no reconoce diéresis, apóstrofes ni acentos.
Su nombre Marcela Jaxëëw que significa “Lucero de la Mañana” aparece correctamente en su acta de nacimiento y su identificación oficial, sin embargo, el no contar con la Curp le provocó un atraso para obtener una cuenta bancaria; cuatro bancos la rechazaron porque su nombre no coincide con su Curp, y finalmente después de varias horas de desgaste físico y emocional encontró respuesta favorable en un banco de origen canadiense.
Las autoridades del registro civil de Oaxaca y del Instituto Nacional Electoral fácilmente le han recomendado “quitar las diéresis” a su nombre y así evitarse de problemas, pero eso significa asesinar su lengua, pues su nombre ya no s“Lucero de la Mañana” sino quedaría como un simple vocablo ni siquiera de origen mixe.
El Ayuujk (mixe) es una de las 68 lenguas indígenas del país y una de las 16 del estado de Oaxaca, según el INEGI son 114 mil hablantes los que tiene esta lengua. La Organización de las Naciones Unidas (Onu) señala qué entre muchos aspectos, una lengua indígena es impulso de la inclusión social y de la alfabetización, y uno de los orígenes de su desaparición es falta de reconocimiento legal, tal y como ocurre con la joven quién sufre discriminación.
Vivir esta odisea burocrática le preocupa a la joven estudiante de primer semestre de arquitectura, porque sin una Curp donde aparezca correctamente su nombre tampoco puede tramitar su pasaporte, una licencia de manejo u otro tipo de documento oficial.
Al igual en sus certificados de estudios desde preescolar a preparatoria tampoco fueron expedidos con su nombre escrito de forma correcta, es decir les falta también las diéresis, por lo que es necesario tramitarlos y pagar nuevamente.
Asegura que para las instituciones es tan fácil desaparecer signos de nombres y apellidos, pero eso significaba perder la identidad de una cultura que con tanta algarabía instituciones como el Instituto Nacional de Lenguas Indígenas (Inali) y el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (Inpi) presumen de decir que existen en México, pero no las defienden como estos casos donde por la falta de una Curp está en riesgo sus estudios.
“No tener una cuenta bancaria significa que no podría tener acceso a una beca escolar, y no tener una beca es no continuar mis estudios y truncar mis sueños, algo tan básico como la falta de un sistema digital en estas instituciones están ocasionando que nuestras lenguas mueran, esa falta de sensibilidad de nuestras instituciones es el reflejo que los pueblos nativos, que la gente de comunidades como yo sigamos luchando todos los días por el respeto a nuestros derechos humanos, esa es la constante”.
Ni sus padres ni ella imaginaron todas “las trabas” que ha vivido por tener un nombre en su lengua nativa, que a pesar de todas las frustraciones y desgastes económicos recalca que es un orgullo.
“Cuentan mis padres que a mi hermana y a mí quisieron nombrarnos con nombres de origen mixe por que es una forma de trascender, de conservar y recalcar lo orgullosos que somos de nuestras raíces, y a pesar de los malos ratos seguimos creyendo que ha sido lo mejor que nos ha pasado, pues nombrarnos así, nos da identidad”.
Al respecto, la joven y sus familiares han pensado interponer un amparo ante las autoridades correspondientes a fin de conseguir que en su Curp pueda aparecer sus datos correctos y se reconozca su nombre tal cual lo dice su lengua ayuujk.
*Hace falta el reconocimiento y la aplicación de la ley
En noviembre del 2016, la Cámara de Senadores aprobaron la reforma al artículo 58 del código civil federal en donde reconoce y estipula que los nombres indígenas deben ser reconocidos los apóstrofos, acentos y demás, sin embargo no se ha hecho ley y no se ha publicado en el diario oficial de la federación, por lo tanto a pesar de que las oficialías del registro civil lo aceptan, en la CURP se sigue negando ese derecho a los pueblos indígenas por que no reconoce los apóstrofos, acentos y demás.
Víctor Terán, escritor zapoteca y quien hizo una colección de nombres en lengua zapoteca expresó que lamentablemente no existe el conocimiento de los funcionarios sobre la escritura indígena, por eso tampoco ellos defienden la escritura.
“Hace falta capacitación de los oficiales de todo Oaxaca para que se sensibilicen y puedan escribir correctamente los nombres, al parecer ya se aprobó en el sistema, ahora hace falta que hagan su trabajo”.
Germán Ramírez Martínez, traductor en lengua zapoteca y responsable de traducir en zapoteco el acta de nacimiento explicó que es necesario y urgente que el estado mexicano apruebe la ley a la reforma al artículo 58 y con eso se haga ley que los nombres indígenas aparezcan con apóstrofo, acentos y demás.
Diana Manzo / Agencia de Noticias IstmoPress