Mano Vuelta A. C : Un nido donde las infancias florecen

*Más de 600 niñas han recibido acompañamiento desde el feminismo a través de las artes
*Violencia sexual y digital, una constante en Oaxaca

#Oaxaca 30 Abr (#Istmopress) – Niñas tomadas de la mano cantan, juegan y hablan en “voz alta” en un espacio donde se escucha y se comprende, se abraza y se acompaña, este sitio se llama “Mano Vuelta” una asociación civil oaxaqueña donde las infancias se incluyen y se fortalecen ante la violencia sexual y digital, una constante en Oaxaca.

“Mano Vuelta A.C”, que significa “Tequio o Guelaguetza”, es un nido donde las niñas indígenas y afromexicanas de Oaxaca reciben acompañamiento desde el feminismo y las artes; el objetivo es construir una niña fuerte y no reconstruir a una mujer rota.

La ausencia del estado y falta de las políticas públicas para las niñas indígenas o afro mexicanas, aunado a su experiencia de vida con sus ancestras (abuelas y madres) motivó a cinco jóvenes zapotecas y afromexicanas “Guille Edith Leyva, Dyadha Herrera, Laura Melchor, Indira Rodríguez y Ángeles Juárez” a impulsar y seguir dando vida a “Mano Vuelta A.C”, y así crear una sociedad equitativa, es decir de libertades a través de la investigación e iniciativas comunitarias con perspectiva de género, derechos e interseccional.

De forma autogestiva, las profesionales en psicologia y pedagogia emprendieron este viaje y lo que han logrado es reunir a por lo menos 600 niñas oaxaqueñas, a través de sus campamentos feministas y artísticos que se llevan a cabo en verano en las diversas regiones de la entidad y de forma constante se reúnen en talleres donde se habla del reconocimiento del cuerpo, de las emociones, la diversidad sexual y el autocuidado.

Hablar con las niñas, sus madres, tutoras y quienes son sus aliadas durante el proceso de la infancia de 5 a 17 años, es enriquecedor, porque se reafirma la urgente necesidad de acompañamiento desde una agrupación social sin fines de lucro.

Mano Vuelta lo que quiere es ver niñas fuertes, responsables y seguras para enfrentar la violencia que se vive actualmente, y prueba de ello, es que con la pandemia del Covid-19, muchas de ellas, convivieron con sus agresores las 24 horas del día durante toda la semana.

“Esa necesidad de encontrarnos en otros espacios, cuando migramos y esas desigualdades que cada vez se afianzan, aunado a la dificultad para acceder a derechos como la educación o la salud y enfrentar la discriminación y el racismo, por la forma de hablar o hasta por vestir un huipil tradicional, nos motiva a seguir; las niñas, jóvenes y mujeres todavía vivimos eso, en la actualidad y queremos que desde la infancia fortalezcan sus habilidades, sean niñas libres para ser lo que quieran y sean agentes de cambio desde su sabiduría”, expuso Guille Edith Leyva, representante legal de Mano Vuelta.

Mano Vuelta es esa red de apoyo que acompaña a la niña y a su madre, a la niña y a su tutora, quien acude a este espacio sale fortalecida por el amplio conocimiento que se le comparte, un conocimiento enfundado en la vida real, en las emociones, la diversidad y la toma de decisiones.

El cuerpo como territorio, la autodefensa, la rebeldía, autonomía emocional y la sanación son los cinco ejes de trabajo de esta agrupación feminista y que a través de los campamentos y escuela feminista busca impulsar la autonomía emocional para la mejor toma de decisiones.

Lograr este caminar no es sencillo, se han roto tabúes y se han sensibilizado a otras personas, las niñas tienen derecho y merecen espacios de participación y libres de violencia y en Mano Vuelta se busca eso, que ellas, sean ellas, que sean libres y conscientes para que sin titubear puedan decir “No” o “si”, pero seguras, olvidándose el que dirán.

*Violencia sexual y digital, una constante en Oaxaca

Ellas no exageran, ni los números mienten y aunque aseguran hay un subregistro de datos; con la pandemia, la violencia sexual y digital contra las niñas creció, y es que los juzgados en Oaxaca cerraron y ¿En dónde se denunciaban estos actos? Pues no había, ante ello, Mano Vuelta reconoce que estas violencias, la sexual y digital, es una constante en Oaxaca, pues durante la pandemia han recibido solicitudes de apoyo en estos temas y ofrecen acompañamiento psicoterapéutico y alternativas desde el arte en colonias de la periferia de la Ciudad para la prevención.

El acompañamiento del estado a las infancias es ausencia, y aunque le corresponde, por que hay recursos, desafortunadamente en los 40 municipios de la entidad donde hay alerta de género, sólo son números, casos, una estadística más que se incluye en las gráficas, pero y sus rostros, sus nombres, de eso no se sabe nada.

La organización feminista, Consorcio Oaxaca denunció el incumplimiento de la Alerta de Violencia de Género contra Mujeres (AVGM) aprobada en 40 municipios de Oaxaca declarada el 31 de agosto de 2018, desde entonces a la fecha, se han registrado 316 agresiones contra niñas y adolescentes en estas localidades.

Expuso que en la Plataforma de Violencia Feminicida en Oaxaca, las cifras más altas de violencia en municipios con este decreto son las desapariciones (271 casos) y delitos sexuales (29 casos). En segundo orden se ubican los feminicidios (6 casos) y la violencia familiar (6 casos), y en tercer lugar los suicidios (4 casos).

Los 7 municipios más violentos para niñas y adolescentes en todo el estado son: Oaxaca de Juárez, con 78 casos; Tlaxiaco, con 24; San Juan Bautista Tuxtepec, con 22 casos; Salina Cruz, con 21 casos; San Pedro Mixtepec, con 13; y Huautla de Jiménez, con 8 casos.

** “Una chambota” luchar contra la violencia

Nadie dijo que luchar contra el monstruo de la violencia fuera fácil, y las impulsoras de Mano Vuelta, lo saben, y aunque de manera autogestiva realizan los esfuerzos para combatirlo, también reciben donativos ciudadanos, hacen alianza y red con otras mujeres, artistas, activistas y organizaciones hermanas y esto para seguir fortaleciendo a las infancias, que están seguras que en la edad adulta, serán mujeres comprometidas con la equidad y el amor a los suyos.

A través de la pagina GlobalGiving https://www.globalgiving.org/projects/empowering-30-indigenous-girls-in-oaxaca/, Mano Vuelta solicita ayuda voluntaria, es una forma de dar continuación a las atenciones y capacitaciones, cierto es, que la mayor parte de toda su labor, es autogestiva a través de rifas y recursos propios.

Guille Edith Leyva, reconoce que es “una chambota” luchar contra la violencia pero aquí están, dándole la vuelta con talleres de concientización y reconocimiento; confía que cuando una mujer conoce sus derechos en la infancia o adolescencia seguramente será una gran persona en la vida adulta, más fuerte, más libre y con autonomía emocional.

Además de las infancias, también brindan capacitación a los ayuntamientos, todo enfocado en los derechos de las mujeres, en la capacidad de crear, crecer emocionalmente y de la libertad.

La labor de Mano Vuelta no es sencilla, y aunque es poco visible, se hace, se busca, se logra. Capacitar a 600 niñas no es nada fácil ¿Quién lo hace, quién lo ha hecho, quién ha pensado en las infancias, ¿Quién?.

Diana Manzo / Agencia de Noticias IstmoPress