«La estación», el mercado de los sabores desde hace más de medio siglo en  Unión Hidalgo

#UniónHidalgo, Oax. 6 Nov (#Istmopress) – Dulces, picantes y  con sal;  son los  sabores que  se degustan desde hace medio siglo en el mercado 7 de noviembre conocido como “La Estación”, un espacio donde se conserva la gastronomía tradicional que elaboran las mujeres zapotecas del municipio de Unión Hidalgo en el Istmo de Tehuantepec.

 

Con el sonido del silbato del ferrocarril, hace 52 años dio origen a este espacio dador de vida de más de un centenar de mujeres que se dedican a la vendimia;  en este mercado se ofrecen desde las comidas exóticas  y tradicionales como la iguana y el armadillo hasta los dulces típicos.

 

Este mercado tradicional se ubica en la zona sur de la localidad junto a las vías del ferrocarril y dio inicio por la necesidad de los viajeros de alimentarse en el trayecto de su viaje que abarcaba  de Ciudad  Ixtepec al poblado de Tapachula Chiapas y viceversa en el año de 1967.

 

A este mercado no solo llegan los comensales de Unión Hidalgo, sino también de Juchitán, Salina Cruz, Ciudad Ixtepec y turistas de todo el país y aumenta en cada temporada vacacional.

 

Los sismos de septiembre de  2017 dañaron casi el 70 por ciento de viviendas de la comunidad y  también este espacio de venta pero las mujeres siguieron usándolo para continuar con su vida laboral,  pues el mercado  7 de noviembre “La estación”, es su única fuente de ingreso.

 

Sin tomar un día de descanso, las  mujeres  ofertan desde las 6:00 de la mañana y hasta las 12:00 horas, una gran variedad de productos que van desde alimentos hasta ropa y calzado.

 

El arroz con leche, las empandas de maíz criollo y el agua de horchata son los  antojitos más gustado por los visitantes, inclusive existe un dicho popular que “quién no disfruta este platillo es por que no visitó el mercadito de la Estación”.

 

Este  lugar se distingue por ser un  espacio comunitario donde  las vendedoras ofrecen sus productos usando la lengua materna el zapoteco y portando su enagua y su huipil típico.

 

También es un espacio libre, sin prejuicio, así como una mujer vende también llegan los muxes,  que son los hombres que asumen el rol de mujer, quienes son recibidos ofertando sus productos.

 

Actualmente, el mercadito “la estación” se ha renovado,  y a pesar de que no goza de luz eléctrica, algunas autoridades municipales se han encargado de realizar el techo  y las bancas de concreto para darle una vista mejor y mayor higiene a los productos que se ofertan.

 

Ellas valoran su libertad y ser jefas de familia,  y aunque señalan que no gozaran de pensión para el retiro,  seguro social y aguinaldo, esto les ha generado un empoderamiento entre la sociedad.

 

Naima Azair Martínez,  fue una de las locatarias de mayor trayectoria, durante más de 40 años se dedicó a la venta de pollo crudo por  herencia de su madre Juanita Martínez López, una de las fundadoras de este mercado público y desde hace cuatro años es su hija la que continúa con este negocio, ella se ha retirado.

 

“Este día 7 de noviembre lo recuerdo con mucho cariño, los tiempos de gloria eran cuando el ferrocarril circulaba con pasajeros, cuando del tren descendían cientos de personas de otros sitios, compraban comida y se iban a su lugar de origen o su destino”.

 

Ahora solo el recuerdo del silbido del tren es  de lo que viven las comerciantes, porque el tren  carguero solo transita una vez al día, pero por fortuna sigue vivo y continua siendo “el mercado de los sabores”  y fuente de ingreso de las mujeres zapotecas desde hace más de medio siglo.

Diana Manzo / Agencia de Noticias IstmoPress

06 Nov Mercado 7 de Nov

06 Nov Mercado 7 de Nov1

06 Nov Mercado 7 de Nov2

06 Nov Mercado 7 de Nov4

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *