El Cuento que cuenta Colín. 

#Juchitán 23 Oct (#Istmopress) – Colín para todos los compañeros maestros, para sus alumnos la maestra Colí, con ella pasa lo que de manera natural ocurre con los nombres y los apellidos, siempre se toma el de mayor sonoridad, su nombre completo es Martha Cecilia Colín Toledo, pero en el istmo el apellido colin no es común, por eso todos optan por decirle maestra Colín.

Cuando la conocí nos tocaba visitar las escuelas de la zona escolar 093, donde me adscribí por seis siclos escolares, en mayo terminó el proyecto “Sendero literario” del cual formé parte, el proyecto hacia entre otras cosas visitar las 17 escuelas que conforman la zona, se visitaba a los niños, sus profesores y en algunos casos los padres estuvieron presentes, íbamos maestros que en ese entonces (ciclo escolar 2018 -2019) estaban a cargo de las bibliotecas escolares en sus escuelas.

Así fue como conocí a la maestra Colín, llegó ese día a la escuela que nos tocaba visitar era una próxima a Vista Hermosa comunidad donde hasta ahora labora, les contó “La cucarachita Martina” a todos los presentes en un salón recién adaptado para biblioteca, al poco rato los niños coreaban las partes de la retahíla, y estaban ansiosos de seguir acompañándola mientras les contaba.     

Colín tiene una voz aguda, en comparación de otros cuentacuentos, podría decirse profesionales. Colin sabe que es pura pasión la que la ha llevado a perder el miedo, a la vergüenza, a equivocarse o que no le pongan atención. Busca historias nuevas que contar, como lo hizo hace una década cuando recién ingresó al magisterio, los maestros de esa escuela tomaron el acuerdo de fomentar la lectura, para ello eligieron los lunes durante el homenaje, o un horario previamente acordado para no interrumpir con las clases.

Para eso ella recordó que su profesora de secundaria les ofreció leer “El llano en llamas” y luego “El perfume” en primer grado de secundaria, en casa también aprovechaba leer los libros que su hermana mayor desocupaba, el gusto por leer se le despertó por su maestra, pero también por su propia cuenta.

El acuerdo lo tomaron los maestros de Paso Real, en una zona escolar de Palomares en la escuela Emiliano Zapata. Pero dice la maestra Colín, “se paraban los niños a escuchar como si fuera homenaje, y perdían pronto el interés, y eso se repetía en cada uno de mis compañeros”.

Me sigue comentando “Busque en internet a otros cuentacuentos o narradores y me convencí como lo hace Aldo Méndez, y luego busque como hacer las mutaciones y transformaciones de las voces de los personajes, cuando pensé que ya estaba llista, estaba muy emocionada, pues ya me tocaba contar y no solo leer el libro en voz alta, desde una lectura plana”. 

Veo en sus ojos una luz de alegría y la sigo escuchando “Pero ¿qué crees? ese lunes justo se anunció un bloqueo de carretera. Me moría de ganas, y se pospuso la semana de mi guardia, en la próxima semana con gusto me planté a contar el cuento, desde esa fecha no he parado”.

Hace una pausa y agrega “En la normal participaba contando cuentos, entre ellos “Los tres enamorados miedosos” un cuento demasiado largo para niños de primaria, muy difícil que lo aguanten sin estarse parando”, recalca Colín. “Luego participo si hay un evento en la escuela o un campamento siempre ando buscando donde participar, me agrada mucho, estoy pensando unirme a unos jóvenes que tienen un programa de radio en la ciudad de Juchitán, quizás puedan venir para acá, y compartir con los niños” se refiere a la escuela “Benito Juárez” donde ahora labora con niños de quinto y sexto grados.

En el lugar de nuestra platica veo una vitrina parecida a una cómoda, se ven libros de los varios programas, es una escuela multigrado y tiene la fortuna de que le lleguen los libros para este tipo de escuelas, vi unos de los primeros editados para libros del rincón, y otros más recientes. 

Quizás la maestra notó mi preocupación y sin formular pregunta alguna me responde a cerca de los libros y su uso en la escuela rodeada de una esplendorosa sombra de un huanacaxtle, la escuela luce recién pintada, un rojo oxido combina con un amarillo champán. Y me dice “estamos a punto de organizar e inaugurar la biblioteca, pero los alumnos del IEBO, nos han solicitado los dos salones, en cuanto se desocupe lo abriremos, mientras saco de la vitrina los libros con los que trabajamos y les trigo otros que yo voy adquiriendo y así le hacemos”.

Por esta parte de los Chimalapas, el sismo de septiembre del año 2017 también causó estragos y fue un motivo importante para que la escuela vieja, olvidada y deteriorada cobrara vida, solo falta que la profesora Colín y sus niños pronto disfruten del espacio destinado a su biblioteca, muestra los adornos y separadores creados por sus alumnos, espero pronto llegue ese día, el gran día de la inauguración de su biblioteca.

Víctor Fuentes / Agencia de Noticias IstmoPress

 

 

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